A partir de 1550 el taller familiar Mey quedó definitivamente asentado en la ciudad de Valencia. Sólo imprimió fuera en dos ocasiones: en 1549 en Murcia, y entre 1552 y 1554 en Alcalá de Henares. En aquellos años, para incentivar que el taller tipográfico de los Mey residiera en Valencia, con todas las matrices y letras necesarias para imprimir cualquier obra, la Ciudad le concedió una subvención anual.
Jerónima Galés permaneció, con los hijos, al frente del primitivo taller en Valencia, mientras Juan Mey trabajaba fuera. El taller Mey valenciano no cesó de imprimir y en esos años, desde el 1549 hasta el 1552, la retribución del Consejo se triplicó de diez a treinta libras y como continuó generando productos librarios de prestigio los jurados de la ciudad incluyeron el taller Mey en la nómina de gastos anuales y en enero de 1553, la ayuda de treinta libras se convirtió perenne. Este es un hecho excepcional, ya que no se entregaba esta dotación a ningún otro taller tipográfico valenciano.
Tratado llamado Camino de perfeccióm que escrivió para sus monjas la madre Teresa de Jesús, fundadora de los monasterios de Carmelitas descalças. Con licencia y privilegio. En Valencia. En casa de la viuda de Pedro de Huete, a la plaça de Yerba. Año 1587. Acosta de Balthasar Simón, mercader de libros junto al Estudio General.
INSTITUCIÓN Biblioteca Valenciana, XVI/192.
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